Es necesario vivir intensamente ¡allí está la gran clave de la vida! Pero ¿cómo entendemos eso de la intensidad?
¿No es acaso intensidad esa vehemencia de las funciones anímicas?
¿No es acaso la intensidad ese grado de fuerza o energía con que obra un agente natural o mecánico?
Entonces, lo adulto, lo maduro, es saber lo edificante, por ser sinónimo de vida.
Asimismo, si realmente se piensa, se darán cuenta muchos que para la mayoría, como dijo Oscar Wilde:
La vida verdadera no es precisamente la vida que llevan.
Por eso yo recuerdo y te digo: Así como el sabio no escoge los alimentos más abundantes sino los más sabrosos, tampoco ambicionemos la vida más prolongada, sino la más intensa!.
Las abuelas, esos seres maravillosos que siempre sirven de pilares en las familias, que unen, que dan apoyo aunque son ellos quienes realmente lo necesitan
¿No es acaso intensidad esa vehemencia de las funciones anímicas?
¿No es acaso la intensidad ese grado de fuerza o energía con que obra un agente natural o mecánico?
Entonces, lo adulto, lo maduro, es saber lo edificante, por ser sinónimo de vida.
Asimismo, si realmente se piensa, se darán cuenta muchos que para la mayoría, como dijo Oscar Wilde:
La vida verdadera no es precisamente la vida que llevan.
Por eso yo recuerdo y te digo: Así como el sabio no escoge los alimentos más abundantes sino los más sabrosos, tampoco ambicionemos la vida más prolongada, sino la más intensa!.
Las abuelas, esos seres maravillosos que siempre sirven de pilares en las familias, que unen, que dan apoyo aunque son ellos quienes realmente lo necesitan
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